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En plena temporada de esquí, en Andorra podemos encontrarnos con una de las sorpresas más simpaticas si lo que te gusta es la nieve, la montaña y los coches. Has conducido alguna vez sobre el hielo? Pues Mercedes-Benz te invita a probarlo conduciendo uno de sus coches equipados con lo que ellos han autodenominado "experiencia 4Matic". Un sistema inteligente de tracción que permite el mejor agarre en las peores condiciones.

La prueba consiste en dar unos giros guiados por el circuito de hielo de Grand Valira con un Mercedes y comprobar su comportamiento real con adherencia 0. Nosotros pudimos probar dos modelos. El GL, un todoterreno "de los de ahora". Y el Clase E, una berlina de lujo.
Puedo decir que el comportamiento fué fantastico en ambos casos, aunque ligeramente superior en el GL como era de esperar. Pero que en el Clase E funcionara tan bien no deja de sorprendernos.
Toda la prueba se realiza con un instructor al lado. El cual te indicará durante el trayecto como debes tratar al coche sobre el hielo para que el comportamiento sea adecuado, no empotres un coche de 40.000e contra el muro y quedes satisfecho con la experiencia. En definitiva son una empresa y te tienen que vender el producto. Pero la realidad es que el instructor fue el que nos incito a darle caña!

Primero, para mostrarnos el agarre del control de tracción inteligente, nos hizo acelerar en primera y nos dijo que apretaramos el gas a fondo. El coche sorprendentemente dejo de patinar y fue saliendo suave y rapido sobre el hielo. Y en la frenada lo mismo. Espectacular!

Despues trazamos unas curvas y cuando le pillamos el truco nos dijo que probaramos a ir un poco más rápido. Esta claro que sin ser un experto y con los neumaticos de serie con los que iban equipados los Mercedes es imposible correr, pero dentro de los limites razonables, el coche se comportaba bien y traccionaba en las curvas suficiente como para salvarte la vida en una carretera resbaladiza. En el circuito fue a la berlina a la que más le costó girar. Por lo largo de su chasis y su filosofia, no es un coche para correr, menos sobre el hielo. Pero se defendia bien.

Podemos concluir que nuestras sensaciones con el sistema inteligente de tracción que ha ideado Mercedes-Benz han sido muy buenas y que es un punto muy a favor para el que busque seguridad o necesite un coche para ir por la montaña. Por otro lado, aunque quizas no todos necesitamos esta tecnologia o gastarnos tanto dinero en un coche, creemos que es un valor añadido para una marca que busca reinventarse. Además nos lo pasamos genial en la prueba! Eso si, si no comprais os asediaran con propaganda el resto de vuestras vidas.